El águila descendió en picado al ver a su presa. El pequeño gorrión batía las alas tan rápido como podía, intentando escapar de las garras de su depredador. El águila aceleró la caída. El gorrión intentaba meterse entre zarzas. El águila estaba dispuesta a atravesarlas. El gorrión se escondió entre las ramas de un árbol. El águila se elevó varios metros y escudriñó la vista. El gorrión permaneció quieto. El águila esperó.
Al cabo de unos segundos el águila encontró al gorrión y reanudó la persecución. El gorrión despegó, evitando al águila. El águila batió sus alas con fuerza. El gorrión mantuvo el ritmo. El águila aceleró. El gorrión estaba agotado. El águila ya sabía que le iba a alcanzar. El gorrión estaba desesperado. El águila estaba cada vez más cerca. El gorrión no podía más. El águila abrió sus garras, a punto de atrapar al gorrión.
Hola! Pasaba por aquí y he decidido comentar...
ResponderEliminarMe ha gustado el texto, y otro que se titula princesas también. Me ha parecido que se mantenía la expectación y el desenlace no me lo esperaba para nada. Además el recurso de centrarse intermitentemente en los dos personajes ha realzado el sentimiento de expectación. Lo que no sé es si poniendo sinónimos que sustituyeran alguna vez al gorrión y el águila quedaría mejor estilisticamente o, por el contrario, arruinaría el efecto que has conseguido.
Saludos.
Puedes criticarme aquí:
http://laputayelescribano.blogspot.com.es/
¡Muchas gracias por comentar! Siempre es agradable conocer nuevos lectores :) Estuve dudando eso que tú dices de los sinónimos, pero al final me decanté por esta opción, espero haber acertado.
ResponderEliminarEn cuanto tenga un poco de tiempo comentaré en tu blog, ¡hasta entonces! y repito: ¡gracias por comentar!